- Oye, ¿me dejas contarte algo?
- Sí, pero sólo si me dices qué es.
- Claro, por eso te lo voy a contar.
- Ya, pero tienes que decirme de qué se trata.
- ¿A qué juegas?
- ¿Yo? ¡Pero si eres tú quien no me cuenta lo que quieres!
- Pero claro, no me dejas elección. No haces más que interrumpirme preguntándome QUÉ te voy a contar.
- Y claro, tengo interés.
- Pues déjame hablar.
- Ya lo hago, no haces más que quejarte.
- ¿Cómo que ya lo haces? ¡Me fusilas a preguntas!
- Venga, pues ale, ya te dejo hablar. ¿Qué me querías contar?
- Mira, no lo sé, déjalo, total, ya no me acuerdo.
- Pues vaya, con las ganas que tenía de oírlo.
- Pues no haber empezado a molestar.
A veces, se tienen muchas ganas de escuchar, pero no dejas decir lo que tienen que decirte que escuches. Hay que respetar a quien te habla, puesto que puede darte la información más importante que nunca pudiste imaginar.
Yo te dejo hablar.
Déjame escucharte.
Quiero hablarte.
Déjame hacerme escuchar.
Con palabras o con miradas, pero oye cuando te llamo y escucha lo que te digo. Porque yo no paro de hacerlo.
- Sí, pero sólo si me dices qué es.
- Claro, por eso te lo voy a contar.
- Ya, pero tienes que decirme de qué se trata.
- ¿A qué juegas?
- ¿Yo? ¡Pero si eres tú quien no me cuenta lo que quieres!
- Pero claro, no me dejas elección. No haces más que interrumpirme preguntándome QUÉ te voy a contar.
- Y claro, tengo interés.
- Pues déjame hablar.
- Ya lo hago, no haces más que quejarte.
- ¿Cómo que ya lo haces? ¡Me fusilas a preguntas!
- Venga, pues ale, ya te dejo hablar. ¿Qué me querías contar?
- Mira, no lo sé, déjalo, total, ya no me acuerdo.
- Pues vaya, con las ganas que tenía de oírlo.
- Pues no haber empezado a molestar.
A veces, se tienen muchas ganas de escuchar, pero no dejas decir lo que tienen que decirte que escuches. Hay que respetar a quien te habla, puesto que puede darte la información más importante que nunca pudiste imaginar.
Yo te dejo hablar.
Déjame escucharte.
Quiero hablarte.
Déjame hacerme escuchar.
Con palabras o con miradas, pero oye cuando te llamo y escucha lo que te digo. Porque yo no paro de hacerlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario